Faltan pocos días para que comiencen las navidades concretamente el viernes 27, cuando nuestro señor alcalde dé luz verde al encendido navideño, muy trabajado en el centro e igual de horroroso que todos los años en mi calle, Aunque esta vez estrenando obras, esas que han durado un largo año, después de levantar aceras recien terminadas dos semanas antes (todos sea por dar trabajo) Pero este año predigo que serán distintas, de hecho ya tengo todos los fines de semana de aquí al 8 de enero ocupados, entre fiestas, cenas, quedadas, mi cumpleaños, el cumpleaños de mi madre, el cumpleaños de (L). Pronostico tambien una desaparición instantánea del sueldo extra, y como consecuencia de esto he tenido que aparcar un viajecito a esquiar que ha surgido de repente, pero que veré compensado en febrero (...)
Por otro lado he de comunicar como hito "interplanetario" que la señora Agencia Tributaria por fín se ha enterado tras dos requerimientos y un informe minuciosamente detallado por mi parte, que soy ciudadano madrileño, ¡Todo un descubrimiento! y por lo tanto ha decidido pagarme lo que me debe desde abril.
En la oficina sigo igual de agobiado que antes, pero ilusionado por nuestros "brotes verdes" que los hay.. Hoy mismo y tras una tensa puja online hemos ganado un concurso de un importe considerable, y que hemos decidido celebrar con un brunch a media mañana. Eso sí, le ha faltado algo de sofisticación.
Y hasta aquí las noticias del periodo prenavideño, en espera de la llegada del mes con más movimiento social del año.
:)
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